Cutting, una peligrosa forma de manejar las emociones.

El cutting es una forma de autolesión que suele ocurrir cuando las emociones resultan abrumadoras y las personas, especialmente adolescentes, buscan alivio mediante el dolor físico. Aunque puede parecer una manera de controlar o calmar el dolor emocional, es una práctica peligrosa que no resuelve los problemas subyacentes y puede llevar a consecuencias más graves.

Este comportamiento generalmente surge como una forma de escape ante el estrés, la ansiedad, la depresión o experiencias traumáticas. Los cortes pueden variar en gravedad, siendo algunos superficiales y otros muy profundos, lo que aumenta el riesgo de infecciones, cicatrices permanentes o lesiones más serias. Además, el cutting es un signo de que la persona está atravesando una crisis emocional que necesita atención inmediata.

Es crucial entender que esta conducta es una llamada silenciosa de ayuda. Las personas que se autolesionan no buscan atención o manipular, sino que están intentando gestionar emociones que no pueden expresar de otra manera. Es necesario fomentar el acceso a apoyo psicológico y la apertura para hablar sobre las emociones como parte de la prevención.